TPV Comercio: Cómo elegir un sistema de TPV

Con miles de productos de hardware y software disponibles e innumerables combinaciones, es esencial saber cómo elegir un sistema de TPV. Su instalación es la culminación de una industria de miles de millones de dólares con numerosos actores que añaden valor en cada etapa del proceso.

Cómo elegir un sistema de TPV

• Asegúrate de que todo el hardware y el software han sido probados para su interoperabilidad.

• Compra productos de marcas acreditadas y probadas. Muchas empresas intentan sacar provecho de las últimas tendencias y carecen de la experiencia y la infraestructura necesarias para respaldar lo que venden.

• Busca soluciones creadas específicamente para tu empresa o sector.

• Pide referencias de empresas similares a la tuya.

• Independientemente de que el sistema de TPV se venda directamente o a través de un VAR, asegúrate de que se ofrezca formación y asistencia.

• Busca socios de hardware y software que sean innovadores. El sector de los TPV evoluciona rápidamente, así que elige socios dispuestos a realizar las inversiones necesarias para crecer y adaptarse.

• Selecciona un software que pueda crecer contigo. Disponer de un software con todas las funciones significa que puedes activar más según sea necesario.

Integración

¿Cómo elegir un sistema de TPV? Una vez que los desarrolladores de software y los fabricantes de hardware completan la integración y están preparados para lanzar la solución completa de TPV al mercado, pueden contratar a los distribuidores de valor añadido (VAR).

Los VAR de TPV, también conocidos como revendedores o distribuidores de TPV, son especialistas en TI que trabajan directamente con los propietarios de empresas para determinar la combinación adecuada de tecnología, hardware y software que se ajuste a tus necesidades empresariales.

Los VAR de renombre aportan décadas de experiencia y realizarán evaluaciones para garantizar que tu solución satisface las necesidades de tus clientes, independientemente del nicho.

El VAR local puede ser una operación de dos o cincuenta y dos personas, pero las empresas que en última instancia están detrás de ellos, son desde desarrolladores de software de tamaño modesto, hasta distribuidores multimillonarios trabajando para garantizar una instalación fluida y sin problemas.